Eterna

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En la contratapa de la primera edición de este libro -junio de 1982- tirada de 5000 ejemplares -totalmente agotada- el padre Hernán Benítez, quien fuera el confesor de Eva Perón, expresa que la autora ha transitado íntimamente los días de Evita tratando de internarse en su psicología, de descifrar su enigma, de develar el porqué de su pasión y de su muerte y agrega: la protagonista de su libro responde en sus constitutivos caractereológicos a Eva Perón, la que yo conocí, como la conocí.
En los dieciocho años que han pasado desde entonces, la protagonista de la obra de Mabel Pagano, no solamente ha crecido en la memoria colectiva, sino que, además ha desbordado los límites del partidismo, para convertirse en un personaje, al que se estudia más allá del contexto político que la rodeó en su momento, en las cátedras de Historia y Literatura Hispanoamericana de las más importantes universidades del mundo.
Por eso, como una manera de rendirle el homenaje que se merece por su relieve en la historia del siglo, vuelve a editarse Eterna, una novela de amor. El amor que fue la vida de esta mujer excepcional; de amor a Perón, de amor a su pueblo. Ese amor que ha vencido a la muerte porque con la última chispa de vida que le quedaba, Evita encendió la hoguera de su eternidad.